Una franquicia es un modelo de negocio alternativo a las fórmulas tradicionales. Si has llegado hasta aquí es porque te parece un modelo atractivo y te estás preguntando: “Quiero abrir una franquicia, ¿por dónde empiezo?”.
Sus múltiples ventajas, junto con la posibilidad de encontrar franquicias rentables y de baja inversión, hacen que muchos emprendedores se planteen esta opción para poner en marcha su propia empresa.
Respondiendo a tu pregunta, empezar una franquicia no es complicado. Sobre todo, porque trabajarás con una empresa conocida y consolidada, con experiencia y un modelo de negocio probado.
Además, como no tendrás que empezar completamente desde cero, los retos y los problemas de financiación, entrada en el mercado y promoción serán menores.
A continuación te damos algunas claves para ponerte manos a la obra.
El estudio de mercado o benchmarking sirve para valorar el sector y las actividades que mejor funcionan en el lugar donde pretendes abrir tu franquicia, y es básico para comprobar la viabilidad económica de tu proyecto.
Debes tener en cuenta:
Respecto al análisis de la competencia, te ayudará a ver qué es lo que funciona y a detectar errores que no debes cometer en tu negocio.
Los aspectos de tus competidores que debes analizar son:
Seguro que también te preguntas “quiero abrir una franquicia, pero ¿qué tipo tiene más éxito?”. La mayoría de las franquicias tienen en sus portales información suficiente para que sepas qué perfil de emprendedor encaja con ellas.
También puedes encontrar información en revistas o portales especializados, seminarios, ferias, etc.
Lo ideal es que busques franquicias que cubran tus necesidades. Te recomendamos que contactes aquellas que llamen tu atención y que les transmitas tus dudas.
Por otro lado, es aconsejable saber qué tipos de franquicias existen. La más habitual es la franquicia individual (uso de la marca, productos, sistema de trabajo y otorgamiento de servicios en un solo local/establecimiento/negocio), aunque también hay:
Por último, valora si tu franquicia va a ser de autoempleo o una fuente de inversión.
Si quiero abrir una franquicia, ¿cómo puedo reunir la financiación mínima? Sin duda te conviene saber cuánto dinero necesitas para poner en marcha tu negocio.
Si tienes varias franquicias en mente, revisa la inversión que requiere cada una, y adáptate a la cantidad de la que puedes hacerte cargo.
Recuerda que es habitual que te pidan, además de disponer de un local, un canon de entrada y un porcentaje de royalties por gastos de imagen, promoción, etc.
Para obtener financiación, puedes recurrir a métodos tradicionales (préstamos bancarios, líneas de crédito, ayudas oficiales, inversores, etc.) o a fórmulas más novedosas, como el crowdfunding. Aparte, la empresa franquiciadora puede también tener opciones de apoyo económico. En nuestro caso, contamos con Jeff Capital: nuestro nuevo servicio con el que podrás acceder al capital que necesitas para impulsar tu negocio y empezar a captar clientes sin descapitalizarte.
Encontrar un partner que se alinee con las necesidades de tu negocio es crucial para alcanzar el éxito.
Conviene crear una relación de confianza, con la que te sientas a gusto. La buena comunicación y la transparencia son imprescindibles. Además, debes comprender el modelo de negocio de manera global.
También es recomendable buscar un partner que te ayude en tu crecimiento actual, pero con el que puedes planificar acciones futuras. Es importante que compartáis los valores y la pasión por vuestro negocio.
Al menos así lo vemos en nuestro modelo de franquicias internacionales Jeff. Estamos comprometidos con la innovación y nuestros modelos están avalados por la experiencia y el conocimiento adquirido.
Apostamos por franquicias rentables y de baja inversión como fórmula de éxito: ayudamos a los emprendedores a poner en marcha su negocio reduciendo al mínimo el capital inicial con iniciativas como Jeff Capital.
Quiero abrir una franquicia pero tengo dudas legales, ¿qué hago? Lo habitual es que la franquicia te envíe un informe con todos los datos y la información sobre su proyecto de ventas y explotación.
Este documento deberás recibirlo al menos 20 días antes de la firma del contrato de franquicia, para que puedas revisarlo. Te recomendamos que prestes especial atención a aspectos legales y económicos como:
Las empresas franquiciadoras cuentan con medios de contacto directo a través de su página web, donde encontrarás un formulario, un teléfono o un correo electrónico.
Por otra parte, en las ferias de franquicias hay stands donde podrás hablar directamente con sus representantes.
Para los franquiciados es importante que el proceso de apertura sea ágil: cuanto antes empiecen a operar, antes comenzarán a rentabilizar su inversión inicial a partir de sus ingresos.
En el caso de Jeff, la apertura sucede en un plazo aproximado de 60 días desde la firma del contrato. Durante este tiempo, se realiza el acondicionamiento y equipamiento del local. En paralelo, el emprendedor completa el curso de capacitación.
En este periodo, también es fundamental trabajar en la campaña de marketing de preapertura. En algunos modelos de negocio, como es el caso de los centros de fitness Fit Jeff, incluso es posible empezar a captar suscriptores antes de la apertura.
Depende del partner y de las condiciones a las que llegues para la firma del contrato, aunque la duración estándar del contrato de franquicia es de 5 años.
Hoy en día, prácticamente todos los contratos de franquicia recogen una cláusula específica sobre procesos internos y know-how para que no sean transmitidos a terceros sin autorización específica.
Esperamos haber respondido a tu duda “Quiero abrir una franquicia: ¿por dónde empiezo?”. Si además quieres empezar con una franquicia Jeff, quedamos a tu disposición para resolver cualquier otra pregunta que tengas. Contacta con nosotros ¡estaremos encantados de atenderte!