Crear una empresa desde cero puede ser un reto apasionante, pero también puede traernos de cabeza. Sobre todo al principio, cuando debemos hacer más trámites y tomar más decisiones.
Aun así, los emprendedores natos tienen la capacidad de no escatimar esfuerzos y buscar las mejores alternativas.
Si perteneces a este grupo y tienes claro que quieres poner en marcha tu propio negocio, estos consejos te ayudarán a resolver tus dudas y aclarar tus ideas.
Aquí te dejamos una infografía con los pasos para crear una empresa:
O lo que es lo mismo, buscar un tipo y un modelo de negocio rentable.
Lo ideal es estudiar todas las alternativas y fórmulas antes de crear tu empresa.
Algunas ideas son fascinantes, pero poco realistas. Por eso debes analizar cada sector y propuesta con detalle.
Ser curioso/a y observador/a, tener actitud proactiva, buscar nuevas formas de hacer las cosas o correr riesgos controlados puede ayudarte a crear una empresa desde cero.
Creatividad y funcionalidad son importantes, pero para crear una empresa no debemos dejar de lado las cuestiones legales.
Determinar su forma jurídica depende de la actividad y el sector, pero también de tus necesidades como emprendedor.
Algunos de los aspectos que debes valorar son:
Realizar un plan de negocio es necesario si se quiere conseguir el éxito al crear una empresa desde cero.
El plan de negocio debe ser realista. Solo así obtendrás una proyección correcta del proyecto que quieres poner en marcha.
Para crear tu plan de negocio, debes:
Aunque pueda resultar engorroso, hacer cálculos es la única manera de estimar costes, pérdidas y beneficios.
Una vez tengas un presupuesto para crear tu empresa desde cero, busca las fórmulas de financiación que mejor encajen con tu modelo de negocio.
Un buyer persona es una representación semificticia de tus clientes ideales (por sexo, edad, perfil profesional, ingresos o nivel adquisitivo, lugar de residencia, hábitos de compra, etc.)
Definir a tu buyer persona es importante para crear una nueva empresa: te permitirá conocer las necesidades de tu público objetivo y optimizar tus futuras campañas de marketing.
Debes encontrar un notario y pedir cita para firmar oficialmente la creación de la sociedad con la presencia de todos los socios.
Previamente, conviene redactar los estatutos sociales. Lo habitual es contactar con un abogado o con una gestoría.
El famoso Análisis DAFO es una metodología de estudio de la situación de una empresa o un proyecto empresarial.
También conocido como FODA y acrónimo de las siglas "Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades", es útil tanto para crear una empresa desde cero como para negocios en situaciones de crisis o reestructuraciones.
Gracias al DAFO, conseguirás analizar factores internos y externos que podrían afectar tu sector y, por ende, a tu negocio.
El análisis de la competencia permite averiguar qué hacen tus competidores y cómo puede beneficiar a tu negocio, y qué errores comenten y tú debes evitar para crear una empresa.
El proceso consiste en identificar aquellas empresas que ofrecen productos o servicios similares a los tuyos, y evaluarlas en función de un conjunto de criterios comerciales predeterminados.
La búsqueda personal puede llevarnos tiempo, pero es bastante relevante.
¿Por qué? Porque incorporar buenos profesionales y buscar talento es determinante en una empresa, aún más si se está empezando el proyecto desde cero.
A la hora de seleccionar a trabajadores, recuerda que el currículum no es lo más importante: conviene buscar gente con ganas de aprender y que se impliquen en tu proyecto, así que presta atención a su personalidad, cualidades o disponibilidad.
Ya has definido qué tipo de negocio quieres, has elaborado un plan de negocio, constituido una empresa, analizado a tu competencia y seleccionado a tus trabajadores.
Después de estos pasos, tu empresa está ya lista para empezar su recorrido hacia el éxito.
Crear un plan de comunicación y marketing es muy importante antes de hacer campañas de difusión y comunicación. ¿De qué sirve tener un gran negocio si no tienes clientes?
Antes incluso del lanzamiento es recomendable comenzar una estrategia de comunicación y marketing para identificar cómo comunicarnos y atraer a futuros clientes.
Conocer los resultados es fundamental para saber si tu plan de negocio funciona según lo previsto. Para eso deberás marcarte unos objetivos S.M.A.R.T., es decir que sean específicos, mensurables, alcanzables, relevantes y temporales, para poder analizar si tu estrategia y esfuerzo te han hecho alcanzar tus metas.
Además, controlar los números es vital para cualquier empresa. Esto implica analizar los resultados de todas las estrategias puestas en marcha para valorar su rentabilidad y optimizar recursos.
Una de las grandes ventajas de optar por una franquicia es que gran parte de estos pasos no tendrás que realizarlos. O como mínimo son pasos más sencillos ya que la franquicia nos adelanta parte del trabajo.
En el caso de las franquicias también hay que crear una sociedad, decidir su forma jurídica y llevar a cabo los trámites para constituirla.
Dependiendo del tipo de franquicia, puedes apostar por una empresa individual, una Sociedad Anónima (para proyectos que requieren de un mayor volumen inicial de recursos) o una Sociedad de Responsabilidad Limitada (ideal para pymes por no necesitar un capital inicial muy alto). Es un proceso que tendrás que hacer en cualquier caso, y siempre antes de firmar el contrato de franquicia.
Por poner el ejemplo contrario, el estudio de mercado y de la competencia vienen dados por parte de la franquicia. En este caso no tendrás que realizarlos.
Sin embargo hay otros puntos que cobran especial relevancia, como la formación a los empleados y franquiciados. Este proceso se vuelve esencial para transmitir el know-how a todos los miembros de la empresa.
Emprender es un desafío. La paciencia y la motivación serán claves para conseguir el éxito. Y si, además, cuentas con un partner como Jeff que te acompañe durante todo el proceso, ¡mucho mejor! Si quieres abrir tu franquicia ¡ponte en contacto con nosotros!